Feliz año

•2 de enero de 2015 • Deja un comentario

Primera noche del nueva año

que fuera aquella noche la última…

Y yo acá.

Y desnudo

¿Es mucho si te pido que caminemos juntos?

No sé… cien metros.

Cuatro pasos. Una baldosa.

¡Es lo mismo!

Tal vez yo pueda tomar tu mano

o mirarte el pelo y los ojos.

Tal vez ahí cante un grillo,

o salga brincando un pudú de entre los arbustos,

o volvamos de una fiesta y hagamos el amor.

Tal vez un poco de agua de lluvia

nos haga caminar más aprisa

y el momento sea aun más fugaz.

Tal vez no quieras.

Y entonces yo vuelva a colocar la llave

del lado de adentro

para que no se pueda abrir de afuera.